sábado, 28 de enero de 2017

Ali Primera

Solo el destino adverso
Pudo segar tuvida
Todo el pueblo, que estuvo disperso
Hoy unido llora tu partida

Pediste que no te lloraran
Cuando dijeras Adiós a tu pueblo
Pediste que te cantaran 
Mas no quisisteis que hubiera duelo

Pero entiende que no se puede
Ser indiferente ante tu partida
Por que a todo el mundo nos duele
Que tuvieras tan mala suerte

No pudieron desintegrar tu cuerpo
Cuando intentaron matarte
Y ahora que estas ausente
Te darán la razón y tendrán que escucharte
Ali allí donde nace el sol
Estará tu rostro sonriente
Al ver que el humilde triunfo
Contra el tirano indolente

Ali ese sol lo veremos
Si las masas populares se deciden
Y para que la lucha continuemos
Yo pido que no te olviden

Un ah mundo
Que suene a llanto
Y que Dios perdone a los que quieren
Ignorar tu hermoso canto y poesía.

domingo, 22 de enero de 2017

Poema  3


El grito de Jose Félix Rivas.


Hoy me conseguí con migo
Y me hice la puñeta y me caí a patadas
Y cavalge sobre lomos de vientos
Y en los amaneceres desperté a la luna
Y las lágrimas bañaron los rosales
De todos los jardines y todos los fusiles
Y las armas del plan Zamora 200 me apuntaban
Y las masas gritaban fuera olp.libertad
Y sudoroso sangriento en el piso con sed de justicia
De canto y poesía recitando las leyes
Códigos, decretos, y ordenanzas
Colgadas de ambas manos miraba al juez
Mapleto y macilento con la bragueta abierta
Y sin corbata arrastrado por los señalamientos
De sombis andantes de papeles verdes.



Poesías del alma


Pesadilla agricola
Hoy el hambre canta y come apresurado,
No se detiene, la prisa lo llama, y lo traga,
No habla, la lengua lo insulta, lo maltrata,
Lo viste y lo desviste, el hambre lo llama
Y despierta en el medio de la finca, y el alambre
El maíz lo patea, lo grita
La carne camina en la nevera se ostina y se va
Se sale el tomate y la cebolla,
Y la lechosa se ahoga de la riza,
La caraota esta de traje de levita y corbatín en el puerto
En la bodega del barco presos están los perniles
Y no creen en la poesía de puerto en puerto
Sale la luna a conversar de nuevo y le arranca lágrimas
Al campesino que habla con el fogón apagado